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| #acampadasol #15M. |
Parece que por supuesto tendría que ser lo obvio. El PP no
es alternativa al PSOE. El PP no tendría que ser alternativa para la gente de
izquierdas, porque no lo es para las necesidades de las clases trabajadoras y
de las condiciones de vida de la inmensa mayoría de la población. El PP tendría
que ser alternativa al PSOE sólo para la minoría financiera y empresarial. El
PP es alternancia involutiva pero no alternativa.
Pero lo obvio es bien distinto. El PP aparece como
alternativa al PSOE a millones de personas que no son ricas ni disponen de
Bancos, empresas, ni grandes fortunas. El PP es alternativa electoral y
gubernamental para millones de personas trabajadoras tanto de los estamentos
profesionales, medios y pequeños propietarios, como para gente que vive de su sueldo
justo, y también para segmentos importantes de la inmigración, a pesar de la
xenofobia que destila la derecha.
Además, sucesos como los de Extremadura y Álava, en los que
IU ha permitido el avance del PP en los gobiernos, muestran que para una cierta
parte de la izquierda incluso se puede llegar a preferir el PP como alternativa
al PSOE (o a un PNV condicionado por Bildu en el caso vasco), con tal de
descabalgar al PSOE de las riendas del poder gubernamental.
Las ideas genéricas tipo "PPSOE", sin referirse a
políticas concretas conjuntas, se dan de la mano con las ideas del tipo
"ni izquierdas ni derechas". Estas concepciones transformadas en lemas
y en dichos populares, trivializan y confunden la tremenda realidad de
explotadores y explotados/as, o de dominación y dominados/as. Al igualar a
grandes poseedores con los no-poseedores /as o pequeños poseedores/as se
introduce la posibilidad de que la representación de la derecha pudiese
favorecer a los desfavorecidos/as.
Eso viene a cuento por el tremendo impacto que tiene la
consigna del "Que no, que no, que no nos representan, que no", pues...
conviene mencionar al PP!
El PSOE está en el gobierno, cierto. No nos representan con
sus políticas, pero la cuestión es que son políticas de derechas, cuyos
ejecutores más genuinos son y serán del PP, o de CiU. Las políticas nefastas,
los intereses económicos y sociales más homogéneos son PPCiU.
El renacer de la izquierda reside en lo más hondo en
resolver de forma satisfactoria este grito profundo, potente y masivo del "no nos representan"
que emerge del #15M.
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