ETA decide el cese definitivo de su actividad armada.
La decisión de ETA es un resultado bien positivo
de la estrategia democrática de la izquierda abertzale.
La Comisión internacional de verificación y el
Acuerdo de Gernika son los parámetros señalados por ETA para la esperada
decisión fundamental.
En el comunicado: "ETA ha decidido el cese definitivo de su actividad
armada. ETA hace un llamamiento a los gobiernos de España y Francia para abrir
un proceso de diálogo directo que tenga por objetivo la resolución de las
consecuencias del conflicto y, así, la superación de la confrontación armada.
ETA con esta declaración histórica muestra su compromiso claro, firme y
definitivo".
La agenda política la
ha establecido y conducido la izquierda abertzale. Batasuna, Sortu, Bildu, y
ahora Amaiur.
El Estado y el
gobierno español ha estado fuera de juego, queda con el paso cambiado. La Conferencia
internacional para la Paz ha trabajado delante de las narices del gobierno
español, pero este gobierno del PSOE prisionero del PP en la política económica
y en la "antiterrorista", no ha sido capaz de aprovechar las nuevas
condiciones que propiciaban un nuevo tiempo para Euskadi, cosa que al final sí
ha realizado el PSE al incorporarse a la conferencia de paz.
El acercamiento de los
presos políticos, la liberación de los que proceda, la libertad de Otegi y sus
compañeros, la legalización de Sortu, forma parte ineludible de fomentar la
consolidación de este paso definitivo que anuncia ETA.
Corresponde contribuir
a este proceso de solución definitivo y al final de la confrontación
armada.
La libertad de Euskal Herria, el derecho a decidir por
parte de la ciudadanía del pueblo vasco (derecho a la autodeterminación) seguirá
en el centro de la lucha política democrática.
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