Esta reflexión en Izquierda Unida (Consejo Político federal, 28 de septiembre) la expuse con las siguientes ideas.
La crisis económica, la crisis política e institucional
Europea y de las autonomías la enfocamos desde la concepción de superar la
limitación estatal nacional de las movilizaciones, de las organizaciones
políticas y sindicales, con la orientación de defensa de una Ciudadanía
europea, con unos derechos y servicios públicos europeos. La Unión Europea
corresponde a la línea de intereses de las grandes finanzas y conglomerados
multinacionales que seguirán con su plan de destrucción social y del trabajo,
pues su solución a la crisis es la anarquía del mercado de la propiedad privada
y revertir su coste a la mayoría social. La victoria de Merkel en Alemania
señala este camino. En cambio la Syriza griega ya ha propuesto movilización
euroregional europea de sur o general para enfrentarse al poder de los jefes de
esas multinacionales.
Para la defensa de lo social, nos es vital luchas juntas y
juntos, sí. Y para conseguir fuerza en esta lucha lo hemos de hacer desde los movimientos
existentes, las mareas, el sindicalismo, su confluencia en movilización y
perspectiva política ciudadana.
En las Islas tenemos una fantástica y potente marea docente
verde. En Cataluña el movimiento existente de una masividad y potencia
inusitada hoy en día se llama "Via catalana hacia la independencia" y
ha creado un instrumento genuino con la Asamblea nacional Catalana. En Cataluña
la lucha fundamental por lo social hemos de incorporarla en esta Vía catalana y
teñirla completamente de los colores de las necesidades trabajadoras.
Hay signos claros de deterioro y desprestigio de la Corona.
Puede ser un preludio de futura movilización y cambio de conciencia a la
concepción democrática republicana.
Hablemos claro. Es este Estado, es esta Constitución de
1978, es este gobierno español del PP, acompañado del autonómico catalán de CiU,
quien golpea y perjudica a la población trabajadora. Las políticas recortadoras
económicas y sociales, el cumplimiento de las imposiciones de la UE, el sostén
de los desmanes de los Bancos y la altas Finanzas, son los que provocan
división y la ruptura de la cohesión social. El principal verdugo para la población
es el gobierno y el Estado actual.
Estamos en una situación que hemos de preparar y contribuir
al fin del Estado monárquico y de esta Constitución con una perspectiva de ruptura
para que se pueda abrir una nueva etapa constituyente con contenido democrático
y social.
En Cataluña este punto crucial y crítico de ruptura se sitúa
en la organización de la Consulta "para decidir" en futuro de Cataluña
y sobre la relación con el Estado español. Una Consulta que sea legitimada por
la movilización ciudadana social y con una decisión democrática que se
convierta en proceso constituyente y nueva realidad política.
La fuerza ciudadana para conseguirlo reside precisamente en
la Vía catalana y en la Asamblea Nacional Catalana.
Para abrir una nueva etapa en el Estado español los votos
son un baremo importante, pero la fuerza reside en la movilizaciones que la población
sea capaz de forjar y en sus organizaciones. Esta movilización y esta fuerza necesita
de la alianza de federalistas con soberanistas e independentistas, en el
conjunto del Estado y en cada una de las naciones.
IU defiende Estado federal español. Es hora de plantearse
Estado y República española, República catalana, República vasca y República
gallega; con las relaciones libres que decidan establecer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario