La contundencia de la victoria electoral de la derecha, la catalana, la española y la extrema derecha, en el Parlament de Cataluña, merece una reflexión amplia y profunda, para extraer lecciones suficientes que permitan dotar a la izquierda de una bandera suficiente para rehacer una referencia política mínima para la movilización contra la crisis económica y sus consecuencias, como ese retorno gubernamental de CiU.
CiU vuelve al gobierno aunque el electorado no les ha concedido a Mas y Duran las mayorías absolutas de antaño con Jordi Pujol. Aún así, CiU dispone de un Parlamento bien escorado a la derecha, con la tranquilidad suplementaria que le puede dar la debacle socialista y de ERC, convertida en crisis de representación de gran envergadura.
La burguesía catalana, apalancada con la española, y en connivencia con el gobierno estatal de Zapatero-Rubalcaba-Salgado, va a sufrir los mismos embates de la crisis económica que su predecesor de las izquierdas. Por supuesto el gobierno de CiU va a estar en sintonía con los poderes económicos y financieros, y se va a mover como pez en el agua en el enfoque de los medios de comunicación. Sin embargo las políticas de derechas que no atajan la crisis y en cambio deterioran a ojos vistas las condiciones laborales y de vida de las clases laboriosas, van a chocar con las demandas y movilizaciones populares.
El nuevo gobierno burgués pasa a estar en correspondencia a un Estado burgués, con una composición burguesa que empieza en su presidente y un programa que a tenor de lo anunciado va a hacer pressing para la imposición de las políticas más derechistas del gobierno español.
Lo que no se ha anunciado, y difícil será que en sus políticas lo aborden, es unas propuestas positivas a las grandes demandas de la sociedad catalana. La necesidad democrática de la consulta o referéndum sobre la aplicación del "nosotros decidimos" de la manifestación del 10 de julio, y respecto a la retirada de la reforma laboral de la huelga general del 29 de septiembre. Quizás se aducirá que las elecciones conforman otro escenario y estas demandas están superadas. El tiempo nos lo dirá, pero sobre la arena social no ha habido elementos suficientes para que las elecciones permitan hacer desaparecer las causas que engendraron el masivo sentir popular mencionado.
no escurras el bulto y contesta a lo que te pone la gente, hombre!!!
ResponderEliminarSi, la verdad es que no dices nada en claro.
ResponderEliminarLo dicho está. ¿El bulto se escurre? Y por la claridad, podéis seguir las preguntas con estas premisas.
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