La luz andaluza y asturiana tiene un color
impregnado de la movilización por la huelga general para rechazar la reforma
laboral del gobierno estatal PP de Rajoy. El varapalo electoral que representa
barrer el paso de Arenas y PP a la Junta andaluza es un resultado adelantado de
la huelga general de mañana jueves 29 de marzo. Andalucía es una ruptura que
frena la marea azul reaccionaria del PP. La huelga y la movilización sindicalista
tiene su propia connotación y ritmos, pero a nadie se le puede escapar que un
nuevo gol al gobierno PP, esta vez por la acción social, darían un punto de
ruptura y quizás de inflexión que pondría al PP como víctima de su propia
medicina; las recetas ultrarrecortadoras de involución social contrarreformadora
son un peor remedio para la enfermedad de la crisis económica capitalista.
Paso la visión en La Aurora. Andalucia y Asturias: avance de la izquierda en el camino de la huelga general. Las elecciones autonómicas en
Andalucia y Asturias han supuesto una importante derrota del PP en el marco de
la preparación de la huelga general del próximo 29 de marzo.
En poco más de tres meses el PP andaluz ha
perdido 420.000 votos, más que el PSOE tras treinta años de gobierno
autonómico. Ese es el impacto directo en el electorado interclasista de la
derecha de la contrarreforma laboral, del durísimo ajuste fiscal, del recorte
de los derechos sociales de los ciudadanos. El PSOE ha perdido 9 diputados,
pero la victoria por décimas del PP es pírrica: no podrá formar gobierno
después de cuatro intentos, a pesar de su victoria en las elecciones generales
del 20-N.
IULV-CA ha conseguido doblar el número de
sus diputados autonómicos hasta 12. Ha recogido un número significativo de
votos socialistas y podrá condicionar desde la izquierda la formación de un
gobierno de izquierdas. Se abre ahora un debate sobre cómo debe ser ese
gobierno, que tendrá que romper con una herencia de corrupción, clientelismo y
políticas socio-liberales que han marcado el largo ciclo de gobierno autonómico
socialista en Andalucia y que las urnas también han repudiado. Un gobierno de
izquierdas con participación o apoyo parlamentario de IULV-CA tendrá que ser un
gobierno de resistencia a las políticas neoliberales, de defensa de los
intereses de Andalucia y de regeneración democrática. El POR considera que la
mejor fórmula para ello es la de condicionar desde el Parlamento andaluz al
nuevo gobierno Griñán, obligándole a cumplir un programa de izquierdas
consecuente.
En Asturias, la división de la derecha en
dos bloques antagónicos, tras la crisis del Gobierno de izquierdas por las
políticas socio-liberales del PSOE, ha obligado a un adelante electoral tras
solo 10 meses de gobierno del FAC. El resultado ha sido que el FAC ha dado paso
al PSOE como primer partido asturiano y que el pulso entre el FAC y el PP por
la hegemonía de la derecha asturiana lo ha perdido el PP: las dos alas de la
derecha asturiana han perdido peso en este pulso. Podrán formar un nuevo
gobierno de la derecha, pero frente a una izquierda crecida, removilizada, en
la que IU gana no solo un escaño, pero sobre todo cuatro puntos que serán muy
importantes en las movilizaciones por la huelga general de los próximos días, para
obligar al PSOE a un giro a la izquierda.
A nivel estatal, la izquierda más
consecuente comienza a rentabilizar la convocatoria de la huelga general contra
las políticas neoliberales antes mismo de que esta tenga lugar. Se refuerza así
la capacidad política de resistencia popular con estos avances de la izquierda
política, sobre todo de IU, y la doble derrota del PP. Se demuestra en los
hechos que la aplicación y las consecuencias de las políticas neoliberales
erosionan la base social del PP, a condición de que haya la voluntad política
de resistir, como la convocatoria de la huelga general por los sindicatos de
clase.
Estamos en el buen camino. Celebremos esta
primera derrota del PP a los cien días del Gobierno Rajoy y preparemos
unitariamente una derrota más contundente aún el próximo 29-M con una
movilización masiva en la huelga general.
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