Por qué la coalición

Una coalición electoral como (IU-ICV-EUiA) es, en la actual situación política, conveniente, necesaria y útil, para difundir unas mínimas propuestas europeístas favorables a las clases trabajadoras, y para conseguir unas personas electas eurodiputadas que sean la voz de estas propuestas en el limitado Parlamento de la Unión Europea (UE). Incluso Izquierda Unida propuso a la Izquierda Anticapitalista (IA) explorar la posibilidad de un acuerdo, pero hubo un rechazo al mismo.

Es conveniente, porque representamos un mismo espacio social en las clases trabajadoras y entre su juventud, que tiene que presentar alternativas a la crisis. La gente trabajadora no entendería que iniciáramos la campaña electoral con disputas, divisiones y rupturas.

Es necesaria, para que las propuestas alternativas -transformadoras, sindicales, anticapitalistas, democráticas- consigan una mínima fuerza. En la polarización bipartidista, y cuando promover movilización es aún calentar motores, conseguir credibilidad y coherencia está también en función de las propuestas concretas y de la capacidad para defenderlas, como elementos previos para imponerlas. Además se trata de que en conjunto la pluralidad coaligada vaya hacia políticas de izquierda en vez de la adaptación de la izquierda a la derecha. Cuanto mayor fuere o se ampliase en su base social y activista combativa, mejor resultaría para que la propaganda de propuestas e ideas se convirtiese en factor real de actuación política.

Es útil, para conseguir atraer la atención de un sector social que se apropie de las propuestas de manera práctica, y disponer de más votos, cosa ya de por sí difícil, por la ley electoral, por el desinterés que genera estas instituciones de la UE, por la crisis en la izquierda que conduce a la división, disgregación y dispersión. Además la ciudadanía dispuesta a ejercer su derecho de voto también intuye si se traducirá en personas electas o no. Por lo tanto esta coalición contribuye a pelear para mantener los dos actuales eurodiputados, el de IU y el de ICV, y a que pueda haber eurogrupo parlamentario distinto a los partidos socialistas.

No sabemos en Cataluña como puede afectar la agresión de los Mossos (policía autonómica) del 18 de Marzo. Y hago la defensa de la coalición incluso siendo uno de los agredidos. Mi propuesta en EUiA, se quedó en minoría. Ahora bien, incluso así, lo que necesita la coalición catalana entre ICV-EUiA no es disolverse, ni alguna dimisión, sino ¡salirse de la Consejería de Interior! Así lo planteé en la dirección de EUiA, y en la ejecutiva de IU. Es notorio que la represión realizada por los Mossos ha afectado a la imagen de ICV; una detestable imagen para la gente joven, universitaria, periodista, y un segmento de la ciudadanía; una imagen de violencia manporrera incrustada en ICV, cosa que no va a favorecer, y en la que EUiA e IU hemos de procurar no compartir; tomando la distancia adecuada, potenciando la campaña propia. Sin embargo romper la coalición existente, o no hacer la europea de aún reforzaría a las políticas y a los sectores a la derecha.