Sábado 26, manifestación No tinc por (No tengo miedo) en Barcelona.
Los
aplausos y el clamor general de “No tenim por” (No tenemos miedo) en la plaza
de Catalunya de la Barcelona ciudad de paz, son la señal más enérgica y
saludable de como se ha iniciado el duelo en la capital catalana.
El jueves 17 de agosto ha sido un día triste, muy negro, en el que el terror se ha cebado en la ciudadanía inocente e indefensa, en las internacionales Rambles barcelonesas y en Cambrils. 15 muertos y 130 personas heridas, un apuñalado de Vilafranca y una mujer en Cambrils, 3 terroristas muertos en Alcanar al manipular los explosivos, otros 4 por los Mossos (la policía catalana) en Cambrils, un quinto en Subirats y 4 personas detenidas.
El jueves 17 de agosto ha sido un día triste, muy negro, en el que el terror se ha cebado en la ciudadanía inocente e indefensa, en las internacionales Rambles barcelonesas y en Cambrils. 15 muertos y 130 personas heridas, un apuñalado de Vilafranca y una mujer en Cambrils, 3 terroristas muertos en Alcanar al manipular los explosivos, otros 4 por los Mossos (la policía catalana) en Cambrils, un quinto en Subirats y 4 personas detenidas.
Rechazamos
el terror y muertes ocasionadas por el ISIS en las Ramblas de Barcelona y en
Cambrils. Nos solidarizamos y transmitimos todo el afecto a los familiares y
amistades de las víctimas asesinadas y heridas.
Barcelona
y Cataluña quieren y pueden seguir siendo ciudad de paz y acogida, tierra de
convivencia e interculturalidad. Denunciamos y repudiamos las consecuencias
nefastas del terrorismo del fundamentalismo religioso, como denunciamos a los
poderosos y a los Estados que lo fomentan, a la vez que lo utilizan para
debilitar y derrotar a los pueblos.
Dolor
y horror, rabia y estupor. Conmoción generalizada. La presión cívica pacifista
se ha decantado por un espíritu de convivencia, respeto y de diversidad,
situando los valores de la libertad, la solidaridad y de la unidad popular como
el mejor antídoto a la barbarie indiscriminada del terrorismo yihadista.
La
islamófoba, la acción xenófoba y racista, como la limitación de libertades en
nombre de la seguridad, no son ninguna solución fiable que evite la actuación
terrorista. La ruptura de la convivencia con el enfrentamiento entre habitantes
autóctonos e inmigración son contraproducentes, pues acrecientan las
desigualdades y agravios.
Denunciamos
la hipocresía del Estado español, los europeos y estadounidense, que fomentan
las guerras como las de Oriente próximo. Denunciamos al militarismo estatal de
Occidente que arman y hacen un lucrativo negocio con los ejércitos, las guerras
de rapiña, extendiendo la desolación, la sinrazón y el odio. Denunciamos la
infame política que trata la inmigración como si no fueran personas hermanas
nuestras, tratándolos peor que a animales, permitiendo un calvario y muerte en
las pateras que surcan el Mediterráneo y en los campos como si fueran
apestadas, sin ningún atisbo de piedad para las criaturas, embarazadas y
personas mayores.
Rechazamos
la rastrera utilización del dolor colectivo del atentado para atacar la lengua
catalana y el derecho a decidir de Cataluña en relación al referéndum del 1 de
octubre.

La
unidad institucional en torno la Audiencia Nacional que reivindica Rajoy, con
la tentativa de instaurar el ejército en las calles catalanas amparado en la
Alerta 5 antiterrorista, se ha encontrado con un pueblo que lucha por la
libertad.
El
Ayuntamiento de Barcelona del municipalismo del cambio con la alcaldesa Ada
Colau, ha defendido desde el primer momento la necesidad de sostener la
libertad y la convivencia. La Generalitat, con el presidente Puigdemont, y el
vicepresidente Junqueras, han hecho piña cívica con el Ayuntamiento por esa
concepción de unidad democrática cimentada en la fraternidad de la población.
La
desesperación encarnada en unas células yihadistas que exportan una muestra del
horror de sus países ahora en Barcelona no justifica a los ejecutores
terroristas, por supuesto. Pero tampoco no tiene que evitar señalar a los
responsables y culpables políticos de que se cometan esas guerras y estos
atentados terroristas.
Alertamos
de que este terror en Cataluña no es algo inusual, excepcional o aislado. Este
tipo de terrorismo se cobra víctimas en su mayor parte en Oriente, aunque tenga
mayor repercusión cuando se produce en las ciudades y capitales del Occidente
militarista.
El
terrorismo del fundamentalismo religioso es el boomerang del militarismo del
imperialismo occidental.
El
odio contra el odio no es la solución.
Expresemos
nuestra repulsa, solidaridad y afecto, defendamos libertad y convivencia en la manifestación
del próximo sábado 26, a las 18 h, en Paseo de Gràcia cruce con Diagonal.
Todos, todas, somos Barcelona. 22 de agosto de 2017
Todos, todas, somos Barcelona. 22 de agosto de 2017
De la Carta de La Aurora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario